Retrato de sí: Complexiones

Mariela Montoya

Motivar y formalizar la obra de artistas emergentes en el país, es uno de los objetivos de la Galería 1887, ubicada en las instalaciones del Ministerio de Cultura y Juventud (Cenac). Este martes 2 de junio se inaugurará a partir de las 18h la exposición intitulada “Complexión” de la artista plástica Mariela Montoya. Actualmente, Mariela cursa estudios de arte en la Escuela de Artes Visuales y Enseñanza de las Artes Plásticas en la Escuela de Educación, ambas en la Universidad de Costa Rica. Asimismo trabaja en la sección dedicada al arte en el proyecto de Canal 15, Música por inclusión.

Su obra, más que ser una búsqueda privada sobre sí misma, intenta ser la exploración de un sistema de redes sociales, en donde la creación de objetos lleva a quienes los crean, a ámbitos que ellos mismos no imaginaron. Las imágenes expuestas se expresan a partir de una experiencia de vida que se circunscribe dentro de una problemática más basta. Por un lado, dichas imágenes, se configuran desde una estética posmoderna anclada en la literalidad de lo maquínico. Nuestras sociedades se fundan como totalidades fragmentarias en donde cada una de estas partes debe ser funcional, producir-se en cuanto pieza útil. Por otro lado, encontramos el motivo de la muñeca como máquina social que conecta una pluralidad de experiencias. Ésta es uno de los medios primigenios a través de los cuales nos reconocemos en el mundo y lo construimos. Es una máquina que se conecta con otras y muestra la fragmentación y el sentimiento de ubicuidad del individuo en el mundo. Muchos son los discursos que parten de esta imagen y que parecen haber inspirado la exposición: la intervención de lo médico dentro de los discursos sociales; la mirada al organismo desde la fragmentación de las partes que lo componen y; la naturalización del cuerpo.

Finalmente el tema del retrato que figura como propuesta inicial de su obra, se traduce curiosamente por el retrato de un objeto y no de cualquier objeto, sino de la muñeca, que termina siendo, una especie de feto que se mira dentro de un espacio de seguridad mortuoria, el vacío, lo negro, hasta recordarnos la forma en la cual se mira el cuerpo en nuestras culturas. Lo corpóreo deviene la posesión de un individuo inexistente: un conjunto de partes que deben ser tratadas a partir de una cierta idea ya preconcebida de lo humano (del ser mujer y del ser hombre).

Curaduría: Rocío Zamora Sauma

No hay comentarios:

Publicar un comentario